LOS "TIEMPOS" DEL TIEMPO

“Todo tiene su tiempo” nos dice Salomón en su libro Eclesiastés (3:1)

Una expresión corta pero tremendamente poderosa.

Esta frase es uno de esos principios que por mas que los estudies teóricamente acudiendo a diccionarios, yendo a comentarios y sumergiéndote en idiomas antiguos, solo lo terminarás de comprender  con la experiencia propia.

Si, es la propia experiencia la que te ayudará finalmente entender y comprender tan tremenda verdad.

Por ejemplo, puedes leer y te pueden explicar todo lo referente a lo que sucede en tu vida cuando vives un período de luto, pero es solo el día que te toca despedir al ser amado que percibes lo trascendente que es estar en tiempo de duelo, o podrás leer todos los libros que te enseñen sobre lo sublime y maravilloso de la paternidad, pero el día que tienes en tus brazos a tu propia hija, comprenderás lo hermoso de vivir el tiempo de nacer.

La vida nos va a enseñar en la medida que queramos aprender, y una de las mayores cosas que debemos aprender es que “todo tiene su tiempo.”

Esto me lleva a compartir contigo los siguientes aspectos que considero claves en este tema:

1.    Seamos sabios en el uso de nuestro tiempo

Leí en internet que un grupo de especialistas afirmaba que en  72 años de vida gastamos 21 años durmiendo, 14 años trabajando, 7 años en el baño, 6 años comiendo, 6 años viajando, 5 esperando en filas, 4 aprendiendo, 3 en reuniones, 2 devolviendo llamadas telefónicas, 1 año buscando cosas perdidas, 22 meses en la iglesia , 8 meses abriendo correspondencia inútil, 6 meses esperando en semáforos. Claro éstas son solo estadísticas que variarán de persona a persona, pero no cabe duda que son una muestra de la realidad. Es un verdadero desafío administrar correctamente el tiempo, si nos descuidamos en este punto se nos puede ir la vida sin darnos cuenta. Si eres de los que nunca tienen tiempo, analiza el hecho que siempre habrá  tiempo hacia “adelante”, o sea, si te falta tiempo en el día, levántate mas temprano; prepara también una agenda y se fiel al aplicarla, analiza con sinceridad tu estilo de vida y ajústalo para potenciar sabiamente el uso de tu tiempo.

2.    Seamos humildes frente al paso del tiempo

El tiempo pasará queramos o no, esta es una verdad infalible e inexorable. Seamos humildes frente a este hecho. Hay personas que se resisten a la realidad del paso de los años y viven en una constante lucha y amargura, únicamente logrando no disfrutar de ese tiempo contra el cual luchan una batalla ya perdida. Ser humilde no significa ser pesimistas, sometidos o entregados. Debemos cuidar nuestra salud, nuestro cuerpo y mente, claro que si! Pero entendiendo que hagamos lo que hagamos, las arrugas llegarán, la gravedad hará su parte, el cabello se caerá o se emblanquecerá y no por eso la vida dejará de ser vida.

3.    Dediquemos tiempo a lo de que verdad importa

No se trata solo de no malgastar el tiempo, se trata también de usarlo de la mejor manera. El apóstol Pablo nos aconseja: “aprovechando bien el tiempo” (Efe 5:16). En este punto yo no puedo decirte todo lo bueno que debes hacer con tu tiempo cada día, pero lo que si puedo decirte es lo que no debes dejar de hacercada día.

–No permitas que pase un día entero sin hablar con Dios ni estudiar Su Palabra.

–No dejes de dedicarle tiempo a tu familia.

–Dice Martin Luther King que siempre es buen momento para hacer lo correcto, así que cuando puedas ayudar a alguien, hazlo.

4.    Disfrutemos cada etapa de la vida

El mismo Salomón nos dice que Dios “todo lo hizo hermoso en su tiempo” (Ecle. 3:11). Por esto, debemos tratar de disfrutar de la mejor forma cada etapa de nuestra vida, no nos lamentemos por el tiempo que ya pasó, pues no volverá, y no nos angustiemos tanto por el futuro, pues la gran mayoría de temores respecto a él puede que no sucedan. Dios hizo hermosa la infancia, la juventud, la adultez y la vejez, los solteros deben ser felices y los casados también, la etapa matrimonial sin hijos es muy linda, la etapa con hijos también lo es, ser padre es maravilloso, ser abuelo dicen que es aún mas. Proponte disfrutar la etapa que ahora vives, de tal forma que estés mejor preparado para la siguiente.

5.    Entendamos que somos responsables en gran parte de los tiempos que podamos vivir o no

Tengamos presente que son nuestras propias decisiones las que determinarán en gran medida los tiempos que vivimos. Por ejemplo, si me dedico fielmente a tener tiempo de ahorrar, cuando llegue una dificultad financiera lógicamente ésta se podrá enfrentar de una mejor manera o, si no dedico tiempo a estudiar  la  materia correspondiente, cuando me entreguen la nota final, es muy posible que lo que debió ser un tiempo de alegría, será mas bien, tiempo de llanto. Este punto está relacionado con el primero, pues el uso sabio del tiempo, ayudará a que en el futuro tengamos a su vez mejores tiempos. Te pregunto: ¿lo que estas haciendo hoy, te ayudará a tener buenos tiempos mañana?

6.    No olvides que Dios quiere que vivamos en aquel lugar donde el tiempo no importará.

Si hay algo que debemos tener presente, es que la mas hermosa promesa de Dios es aquella que nos proyecta al futuro, a la vida eterna. Soy cristiano, y creo en esta promesa, creo que Jesús vendrá a buscar a los suyos, y los llevará a vivir con Él por la eternidad a un lugar donde el tiempo no importará, pues éste allí nunca se acabará. Para que podamos vivir en ese lugar de tiempo eterno, debemos hacer lo correcto ahora en este tiempo, “hoy es el día de salvación” (2 Cor. 6:2),  es hoy cuando debemos estar de la mano con Dios, es hoy cuando necesitamos de Su bendición.

“Si el tiempo es lo más valioso, la pérdida de tiempo es el mayor de los derroches.” 

Benjamín Franklin

Tu amigo, Daniel Cabezas C.